Por Silvia Noé y Esther Pérez.
Es una pregunta que
nos hemos hecho en las últimas semanas. Nos ha hecho reflexionar y
cuestionarnos algunos puntos que queremos compartir contigo.
La cuestión surge a
partir de situaciones muy diversas: en el contexto profesional (reuniones, foros con responsables de RRHH,…) y también
en el entorno personal (con nuestros hijos en plena pre adolescencia, en la
relación que establecen con su entrenador deportivo,…).
Pero primero
recordemos brevemente la teoría de Mundos: los 6 mundos puros y como la
pertenencia, a uno u a otro, condiciona las interacciones entre las distintas
personas.
¿La edad condiciona la pertenencia a los Mundos de referencia?
Las primeras situaciones
que nos suscitaron la duda se produjeron en el contexto profesional: reuniones
con jóvenes mandos del área de personas y negocio, con buena formación
realizada, en la mayoría de los casos, fuera de sus países de origen y con una
experiencia laboral incipiente-reducida en el ámbito empresarial.
Presentamos la
Metodología de Cambio de Mundo: los 6 mundos de referencia, el diseño
compartido del Mundo Actual y del Mundo Deseado (mundo al que deseo acceder en
función de la estrategia, los clientes, los cambios en el mercado), las
pasarelas que nos van a permitir pasar de uno a otro mundo. Nos sorprendimos al
escuchar su respuesta: “Nosotros, por ser
de la misma generación, tener una sólida formación, haber experimentado
vivencias multiculturales, ser creativos e innovadores pertenecemos a un mismo
mundo, no tiene sentido para nosotros diseñar un Mundo Deseado y por lo tanto
tampoco las pasarelas que nos conecten con ese Mundo. En nuestra organización
todo funciona como si ya estuviéramos en el Mundo Deseado”.
Cuál es tu opinión,
¿las nuevas generaciones Y, nacidos entre 1982 y 1994, en plena ebullición
tecnológica, representan un mundo de referencia con unos códigos comunes
distintos al de los otros mundos? ¿Pertenecen los jóvenes de esta generación al
Mundo de la Inspiración? ¿Qué sucederá si el mundo de sus clientes pertenece a
otra generación, con otras vivencias?
No hay comentarios:
Publicar un comentario